La adoración a Dios es una de estas cuestiones que debemos de ponerlas entre las muy destacada entre las enseñanzas de la Biblia, pero ha llegado a ser hoy, por diversas razones, un asunto confuso y de controversia.
Como podemos comprobar en los últimos años, la adoración en la iglesia ha sido uno de los temas que dividen a las iglesias. Que diferencia podemos ver entre iglesia a iglesia. Porque cuestiones como ¿Qué incluimos, y hacemos en la reunión y los cultos a Dios? ¿Cómo adoramos? Ha venido a ser un tema de tensión.
En Efesios 5:16, el apóstol recuerda a esta iglesia que tiempos están a atravesando, cuáles son las condiciones en las que ahora están en el viaje que hacen hacia la ciudad celestial: son, precisamente, días malos.
¿Malos en qué sentido? Pues mirando el contexto de estas palabras, y en el sentido en el que suele usar Pablo este término no son días malos porque hay falta de trabajo, o porque sufren plagas y enfermedades con frecuencia.
Más bien tenemos que pensar que al usar tal término se refiere a la actividad característica del diablo, o a la obra del pecado...